La proliferación de algas mata al salmón de piscifactoría en Noruega

El llamado "gen asesino" del norte de Noruega amenaza la acuicultura

La floración maligna del alga Chrysochromulina leadbeateri, muy extendida en la costa noruega, ha provocado la muerte de salmones en granjas de los condados de Nordland y Troms

Las microalgas suelen ser inofensivas para otras formas de vida marina y constituyen una parte importante de la cadena alimentaria. Son la "hierba" del océano, que constituye la base de las cadenas alimentarias marinas. "Sin embargo, unas pocas especies de microalgas se describen como nocivas, y algunas de ellas pueden causar la muerte de peces y otros organismos marinos", explica Lars-Johan Naustvoll, investigador marino y experto en algas.

En Noruega, la vida marina moría principalmente por las floraciones de algas de las especies Chrysochromulina leadbeaterii, Prymnesium polylepis, Prymnesium parvum, Pseudochattonella farcimen y Karenia mikimotoi (Gyrodinium aureolum). Ahora se ha demostrado que la primera de estas especies de algas fue la responsable de la reciente muerte de peces de piscifactoría en Nordland y Troms.

La Chrysochromulina leadbeaterii es un tipo de fitoplancton que flota libremente en el agua. Esta especie relativamente común puede observarse a menudo en primavera, pero normalmente sólo en pequeñas cantidades. En este caso, es sólo una parte de la gran variedad de microalgas de las aguas costeras. Es muy raro ver algas en grandes cantidades, que se denominan flores, lo que puede provocar la mortalidad de los peces. "La especie pasa entonces de la parte natural del fitoplancton a la floración de algas", explica Naustvoll. "Los peces salvajes se alejan nadando del fiordo o se adentran en aguas más profundas cuando se producen estas flores, pero los salmones de piscifactoría no pueden escapar, por lo que mueren los peces", explica Naustvoll.

Los estudios indican que este tipo de algas excreta compuestos hemolíticos. Si éstos entran en contacto con las branquias de los peces, causan daños que pueden provocar que el pez no absorba suficiente oxígeno y finalmente muera. En concentraciones moderadas, por debajo del nivel letal, las algas pueden provocar cambios en el comportamiento de los peces. Entonces flotan hacia la superficie y boquean.

No es la primera vez que esta especie de alga se relaciona con la muerte de salmones en esta parte de Noruega. Hubo una gran floración en mayo y junio de 1991 y otra más pequeña en mayo de 2008.

Al observar los cambios de comportamiento y la muerte de los peces, los científicos pueden hacerse una idea de dónde se producen las floraciones. "Seguimos de cerca la situación recogiendo datos de las zonas afectadas, y combinando esta información con modelos de corrientes oceánicas, intentamos informar a los piscicultores sobre hacia dónde irán las floraciones de algas, pero no podemos garantizar que se extiendan a los lugares indicados en nuestras previsiones Hay muchos factores implicados", dice Naustvoll.

"Las algas consumen nutrientes inorgánicos, lo que reduce la cantidad de algas con el aumento del uso de nutrientes", explica Naustvoll. Las floraciones de algas que se "pegan" a los fiordos tienden a consumir los nutrientes inorgánicos y luego mueren. Sin embargo, cuando las algas son transportadas a zonas donde hay nutrientes, pueden seguir floreciendo.