Atlántico: La UE prohíbe la pesca de arrastre de fondo en aguas profundas

Una sentencia mejora la protección de los océanos Tras cuatro años de negociaciones, la UE ha impuesto la prohibición de la pesca de arrastre de fondo en las regiones de aguas profundas del océano Atlántico. Un total de 4,9 millones de kilómetros cuadrados de fondo marino quedarán protegidos de este destructivo método de pesca. En una declaración, el WWF ha calificado esta acción de decisión destacada para la protección de los ecosistemas de aguas profundas. "Es un buen día para los arrecifes de coral de aguas profundas y sus habitantes, como el pez rosa y los tiburones. Aunque la prohibición sólo se aplica a las aguas de la UE hasta 200 millas náuticas de la costa, no es sólo para alta mar en el Atlántico Nororiental, sino también para alta mar frente a África Occidental hasta las Islas Canarias y Madeira", dijo Stephan Lutter, experto marino de WWF Alemania. Según el WWF, una prohibición tan completa del acto destructivo de la pesca de arrastre de fondo sólo existe hasta ahora en el Mediterráneo a profundidades a partir de los 1.000 metros. La propuesta regula la pesca de altura sostenible y respetuosa con el medio ambiente de la UE en el Atlántico Nororiental y resuelve un antiguo reglamento de 2002 de la entonces Comisaria de Pesca de la UE, Maria Damanaki, que data de 2012. Sin embargo, su documento no contenía esta nueva legislación sobre la pesca de arrastre de fondo por debajo de 800 metros, que sólo se consiguió durante las negociaciones en las que participó una coalición de organizaciones ecologistas y WWF. Esta Coalición para la Conservación de las Profundidades Marinas (DSCC) fue apoyada en parte por la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo, que podría fallar desfavorablemente contra los Ministros de Pesca. El WWF había elogiado expresamente a la Presidencia neerlandesa por su participación en las negociaciones. Además de la prohibición de la pesca de arrastre de fondo, el WWF sugiere también que se lleven a cabo las siguientes reformas: que se prohíban las redes de fondo y las redes de enmalle a más de 600 metros de profundidad, y que se exija un permiso para la pesca de altura en zonas que antes no se pescaban. Se exige que el 20% de los barcos pesqueros que faenan en aguas de la UE lleven un observador a bordo para garantizar la exactitud de los datos recogidos. Además, también se sugiere que cesen todas las actividades pesqueras en la zona si las redes entran en contacto con algún coral de aguas profundas y otros ecosistemas de aguas profundas.