Balleneros japoneses matan 333 ballenas en el Antártico

La ciencia como excusa para la caza de ballenas por motivos comerciales

Como en años anteriores y a pesar de las protestas internacionales, Japón también mató 333 rorcuales aliblancos en el océano Antártico en 2018, exactamente el mismo número de animales que en 2016 y 2017.

Según las autoridades japonesas, el sábado 31 de marzo de 2018, tres de los cinco barcos de la flota ballenera entraron en el puerto de Shimonoseki, en el sur de Japón. Bajo el pretexto de la ciencia, mataron un total de 333 rorcuales aliblancos, como estaba previsto. El aspecto científico de la caza probablemente lleva años fingiéndose: la carne de los animales se destina al consumo. La caza comercial de ballenas está prohibida internacionalmente desde 1986. Japón aprovecha alegremente una laguna en los tratados para permitir que se maten ballenas con fines de investigación.

Japón lleva años burlando la prohibición de la caza de ballenas. Ya en 2014, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) dictaminó que el programa de caza de ballenas antárticas de Japón en aquel momento era ilegal porque no cumplía los requisitos de la Comisión Ballenera Internacional (CBI). También para el actual programa de seguimiento, Japón no cuenta con la aprobación de la CBI.

Según informaron los medios de comunicación, no se habían producido grandes protestas de organizaciones ecologistas contra la caza de ballenas japonesa como en años anteriores.

Ver también:
https://blog.mares.com/japan-kills-333-whales-in-annual-hunt-4178.html