Lo que siempre quisiste saber sobre la restauración de los arrecifes de coral

January 11, 2017 Las cosas no pintan bien para los corales. Como sólo quedan unos pocos arrecifes de coral realmente sanos y las previsiones no mejoran, puede que a muchos arrecifes les cueste vivir para ver el próximo siglo. Puede que la llamada a la acción ya sea acuciante, así que ¿qué podemos hacer para contrarrestar el declive de los arrecifes de coral? Muchos de nosotros hemos visto arrecifes de coral en mal estado: devastados, blanqueados, contaminados, dañados por anclas, sin sus poblaciones obligadas de peces o invadidos por las algas. Sabemos que el cambio climático, especialmente el aumento de la temperatura del agua del mar (IPCC: impactos en los arrecifes de coral), así como los factores de estrés inducidos por el hombre, como la pesca insostenible y la contaminación, se lo están poniendo difícil a los corales. El 3 tercer blanqueamiento global acabó con los corales a escalas alarmantes. Por ejemplo, la Gran Barrera de Coral sufre la mayor pérdida de corales de la historia. Hasta ahora, nuestros esfuerzos para hacer frente al cambio climático, la sobrepesca, la contaminación y otras amenazas no han conseguido ni siquiera ralentizar el declive de los arrecifes de coral. En los últimos años, la posibilidad de utilizar la restauración activa de corales como herramienta adicional para la gestión de los arrecifes de coral ha atraído cada vez más la atención de científicos, gestores de AMP y partes interesadas locales, así como de los medios de comunicación. Pero, ¿podemos realmente "repoblar" de corales los arrecifes dañados y, en caso afirmativo, cómo y a qué escala? La restauración de los arrecifes de coral hoy Como todos los animales, los corales necesitan crecer y reproducirse, y un arrecife dañado sólo puede recuperarse haciéndolo. Los corales tienen dos formas de reproducirse: asexualmente, cuando vuelven a crecer fragmentos de una colonia, o sexualmente, desovando óvulos y esperma o liberando larvas. Algunos arrecifes de coral ya no tienen capacidad para recuperarse por sí mismos. La restauración de los arrecifes de coral es el proceso de trasplantar corales para "reforestar" un arrecife desolado. Puede parecer sencillo, pero no lo es. Aunque se han desarrollado muchos conocimientos y prácticas, la restauración real de los arrecifes de coral se encuentra todavía en un estado incipiente, tanto en la práctica como en la investigación científica. Una práctica habitual es la llamada restauración asexual de corales, en la que se utiliza la capacidad de propagación asexual del coral. Puedes obtener fragmentos de colonias donantes rompiendo trozos, normalmente no más del 20% de una colonia. Los fragmentos resultantes son clones de la colonia donante. A veces puedes utilizar trozos ya rotos, por ejemplo cuando los corales ramificados son fracturados por una tormenta. Entonces, normalmente mantienes los fragmentos en distintos tipos de viveros durante algunos meses. Durante este tiempo, los fragmentos se curan, crecen y están bien cuidados. Por último, trasplantas los corales jóvenes al arrecife o a otro lugar, utilizando pegamento subacuático, ataduras de cables o clavos para la fijación inicial. Si tiene éxito, el coral trasplantado acabará creciendo más que el sustrato circundante y se autoadherirá al arrecife. "Lo bueno de la restauración del coral mediante fragmentos propagados asexualmente es que las comunidades locales pueden hacerlo. Ya hay pequeños grupos comunitarios locales que realizan trasplantes de coral en muchos lugares de los océanos Pacífico e Índico. Si se hace bien, puede ser muy útil. El problema es que hay muy pocos lugares en el mundo donde se pueda demostrar que este esfuerzo ha tenido algún impacto ecológico a largo plazo. Un ejemplo positivo es el reciente trabajo realizado por Nature Seychelles en Cousin Island. Pero, si nos fijamos en muchos de estos esfuerzos de restauración de corales, inicialmente parecen estar bien, incluso después de uno o dos años, pero con demasiada frecuencia en algún momento, algo va mal y la restauración fracasa", dice el profesor Alasdair Edwards de la Universidad de Newcastle, que ha trabajado en los arrecifes de coral durante casi 40 años y encabezó el proyecto ' Re Manual de Rehabilitación del arrecife', una recopilación para gestores. Recientemente se ha convertido en miembro del Consejo Científico de SECORE. ¿Por qué estos enfoques tienen tan poco éxito? El método en sí no parece excesivamente difícil de llevar a cabo. "El mayor peligro de la restauración asexual es que el ser humano toma decisiones ecológicas y se salta la selección natural. Asumes que esta colonia de coral o aquella están bien adaptadas al entorno del lugar de trasplante. Crees que deberían estarlo, sin embargo, no lo sabes con certeza. Aunque utilices una amplia gama de individuos genéticamente diferentes para mantener la biodiversidad genética, estos fragmentos nunca pasaron por el periodo inicial de intensa selección en ese lugar, como lo habría hecho cualquier recluta sexual que se asentara en el arrecife", explica Alasdair. Así pues, hay que tener en cuenta que la vida es dura para los pequeños corales reclutas; en la naturaleza, ¡sólo un 1% sobrevivirá a los primeros meses de su vida! Hay un ejemplo sencillo de las islas Fiyi que ilustra la importancia de la adaptación local para la restauración. En las islas Moturiki, los corales del arrecife murieron tras el blanqueamiento de 2000 y 2002. La comunidad local estaba preocupada y quería replantarlos. Por desgracia, no quedaban corales en el arrecife que pudieran fragmentarse y utilizarse para la restauración. Así que tuvieron que cogerlos de otro lugar, de un arrecife más profundo y, por tanto, de un entorno distinto en el que los corales no están adaptados a la vida en la llanura arrecifal. Al principio, los fragmentos trasplantados funcionaban bien, pero cuando empezaron las estaciones más cálidas, todos los corales trasplantados de la llanura de arrecife se blanquearon y murieron. ¿Por qué es importante mantener la diversidad genética? La diversidad genética significa tener distintas variedades de combinaciones de genes, los llamados genotipos, dentro de una población. Hay razones importantes para mantener la diversidad genética: una población diversa tiene más probabilidades de sobrevivir a brotes de enfermedades u otras tensiones, ya que algunos genotipos pueden ser más resistentes que otros y sobrevivir. Cada vez que una población se reproduce sexualmente, se produce un nuevo lote de genotipos por recombinación, por así decirlo, reorganizando el paquete genético. Y la diversidad genética es un requisito previo para que la selección natural haga su trabajo. Eso no significa necesariamente que no puedas mantener la diversidad genética con enfoques asexuales de restauración de corales. Los estudios sugieren que si recoges fragmentos de 30-35 colonias genéticamente diferentes de una especie de coral en un arrecife, representarán más del 90-95% de la diversidad genética de la especie en ese lugar. Durante el trabajo de restauración, tienes que asegurarte de que en cualquier esfuerzo de trasplante esté representado un conjunto diverso de genotipos. Una vez que tus corales empiecen a reproducirse sexualmente, tu nueva generación de corales tendrá toda la diversidad genética que desees, pero sólo entonces. Educación medioambiental La restauración asexual de corales tiene el gran potencial de funcionar como herramienta de concienciación; no sólo entre las comunidades locales y las partes interesadas, sino también entre los buceadores y submarinistas visitantes. Mantener la flotabilidad mientras buceas y no dejar rastro ( salvo tus huellas en la arena) es siempre importante. Pero también puedes aprender más sobre los corales y su restauración visitando los viveros y observando los corales recién plantados -algunos de vosotros habréis visto esos viveros de coral por vosotros mismos o incluso habréis ayudado en tales esfuerzos-. Conseguir que los turistas se conciencien y que la gente in situ se comprometa a participar en proyectos locales de conservación es un requisito crucial para que cualquier esfuerzo de protección y restauración medioambiental sea duradero. En las Maldivas, por ejemplo, muchos complejos turísticos utilizan con éxito los esfuerzos de restauración para educar a los turistas. Otro ejemplo es el trabajo realizado por la Expedición Akumal: utilizan pequeños fragmentos ya rotos de corales cuerno de ciervo con fines de restauración y la concienciación de los buceadores forma parte de su esfuerzo. Restauración sexual Un enfoque alternativo para producir corales para la restauración es la restauración sexual de corales: estudiada y desarrollada por SECORE y sus socios durante la última década, aprovecha la propagación sexual de los corales. En pocas palabras, recolectas gametos de coral -huevos y esperma- bien sobre el terreno o a partir de corales que has llevado a tus instalaciones de laboratorio con ese fin. Una vez que tienes los gametos, dejas que fecunden y críen las larvas de coral en desarrollo. Cuando las larvas estén listas y sean competentes para asentarse, les proporcionas los sustratos de asentamiento adecuados y esperas a que se hayan asentado. Lo ideal es que las dejes crecer en un vivero de media agua en el arrecife hasta alcanzar cierto tamaño, proceso que puede durar semanas o meses, antes de trasplantarlas al arrecife. "Los corales asentados de forma natural empiezan su vida como minúsculos pólipos individuales, de un mm de diámetro más o menos. Cuando alcanzan el tamaño de un fragmento de coral trasplantado, ya habrán pasado por un largo periodo de selección, probablemente años, en el entorno del arrecife", explica Alasdair. Y para los que han muerto: al menos no se dañó ningún coral para obtenerlos. Hay dos grandes diferencias entre los métodos sexuales y los asexuales: cada una de tus crías de coral es genéticamente única y tienes que cultivar tus corales desde el principio. Enfoques asexuales frente a sexuales "Ambas técnicas tienen sus ventajas e inconvenientes", reflexiona el Dr. James Guest. James es experto en reproducción y restauración de corales en el sudeste asiático, con especial interés en el estudio de la capacidad de recuperación de los arrecifes de coral. James trabaja actualmente en el Instituto Hawaiano de Biología Marina y es miembro del Consejo Científico de SECORE desde 2012. "La propagación asexual es menos costosa a pequeña escala y puede hacerse con relativamente poca formación. Con la propagación sexual se produce recombinación sexual y se obtienen montones y montones de crías; de un desove se pueden obtener potencialmente un millón de corales; producir un millón de fragmentos sería todo un reto. Tenemos que estar preparados para adoptar ambos enfoques, o una combinación de ambos. Por ejemplo, cuando las colonias de coral están muy separadas, podrías utilizar la fragmentación para crear una población reproductora. También puedes hacer un seguimiento de quiénes son sus progenitores para mantener la diversidad genética. Cuando tus reproductores desoven, puedes obtener crías propagadas sexualmente. Podrías obtener algunos resultados rápidos utilizando la propagación asexual y luego algunos resultados a más largo plazo con la propagación sexual." Trabajando codo con codo Un buen ejemplo de cómo combinar ambas técnicas son los actuales esfuerzos de investigación y restauración del coral cuerno de ciervo, en peligro de extinción, en Curaçao: El coral cuerno de ciervo (Acropora cervicornis) suele tener ramas bastante quebradizas y formar "matorrales" relativamente grandes por propagación asexual; por ejemplo, cuando las tormentas rompen esos corales. Debido a su escasez actual, las manchas están demasiado separadas entre sí para recoger el desove de progenitores genéticamente distintos que podrían fecundarse durante un evento de desove: los corales con el mismo genotipo no se fecundan entre sí. Hasta ahora, la SECORE y su socio a largo plazo Carmabi Research Station no habían podido criar corales cuerno de ciervo reproducidos sexualmente. Después, en 2015, la Fundación para la Restauración del Coral de Curaçao ( CRFC), apoyada por Ocean Encounters (una escuela de buceo local), inició un proyecto de restauración asexual. Incluye el crecimiento y trasplante del coral cuerno de ciervo, en peligro de extinción en Curaçao. El CRFC recogió fragmentos ya rotos de corales cuerno de ciervo y los colocó en viveros que tienen forma de árbol, los llamados "viveros de árboles de coral". Los fragmentos de los viveros procedían de distintos lugares de arrecifes y, por tanto, lo más probable es que representaran genotipos diferentes. Impulsados por la idea de que los fragmentos de coral de los viveros podían utilizarse como reproductores para la propagación sexual, los distintos grupos unieron sus fuerzas. Y durante el desove masivo de coral de 2016, en agosto, ¡los fragmentos desovaron! Un equipo conjunto de submarinistas recogió gametos de coral cuerno de ciervo, los llevó al laboratorio y los fecundó. Ahora, una nueva generación de corales cuerno de ciervo propagados sexualmente está creciendo también en un vivero. Dónde plantar tus corales Independientemente de la técnica utilizada, es esencial elegir bien el lugar de tu restauración. Si encuentras un arrecife devastado, es evidente que murió por una razón o más bien por varias de ellas. A menos que te asegures de que esas razones se han eliminado o al menos están bajo control, no es buena idea iniciar allí ningún esfuerzo de restauración: es improbable que tus nuevos corales sobrevivan. Las mejores posibilidades se tienen en zonas bien gestionadas, donde los factores de estrés, como la sobrepesca y la contaminación, sean lo más bajos posible y haya herbívoros. Aumento de escala: ¿cómo hacerlo realidad? Hasta hoy, los intentos de restaurar los arrecifes se han producido a una escala relativamente pequeña. Teniendo en cuenta la escala a la que se reducen los arrecifes de coral, los esfuerzos no parecen en absoluto suficientes. No sólo se necesita el método adecuado, o una combinación de ambos, sino que también hay que pensar en trabajar a mayor escala. "Para aumentar la escala, la mejor oportunidad puede ser la vía sexual", dice Alasdair. "Asentar los corales en algún tipo de sustrato, un sustrato que pueda colocarse fácilmente en el arrecife, ya sea autoadhesivo o que pueda adherirse fácilmente, según el entorno. En este momento, el mayor reto es la enorme mortalidad que se produce en los primeros meses tras el asentamiento; normalmente más del 95% muere en cuatro meses más o menos." Hay que tener en cuenta que esta mortalidad es natural y sólo muy, muy pocas larvas de coral se convertirán en un coral adulto en la naturaleza. "Somos bastante buenos en las primeras fases, manteniendo gametos y larvas vivos en cautividad, manteniéndolos en buenas condiciones, dejando que se asienten. De un desove pueden salir millones de larvas", dice James. "Pero llega un momento en que las tasas de mortalidad empiezan a aumentar. Nunca podrás reducir toda la mortalidad, pero tenemos que desarrollar métodos para llegar a un punto en el que casi todos los sustratos tengan al menos un coral superviviente. En realidad lo estamos haciendo bastante bien, conseguimos una supervivencia post-asentamiento bastante buena, pero si pudiéramos mejorarla un poco más, eso ayudaría mucho a la ampliación. Y lo segundo es que aún tenemos que llevarlos al arrecife". Hasta ahora, hay que trasplantar a mano al arrecife cada fragmento o sustrato que contenga un recluta de coral. Para los que no seáis submarinistas, bucear implica bastante logística y equipo, y cualquier trabajo bajo el agua está además limitado por la cantidad de aire de tu botella. Por eso el trasplante de corales es la parte más costosa e intensiva en tiempo de cualquier esfuerzo de restauración. Para superar esta limitación, SECORE junto con la Academia de Ciencias de California y otros socios están probando actualmente nuevos sustratos de asentamiento de corales que pueden autoadherirse al arrecife. Puede que no sean adecuados en todos los entornos, pero cuando se inicia un esfuerzo de restauración, lo habitual es tener un arrecife con pequeñas grietas y similares donde esos sustratos pueden engancharse. SECORE y socios como el Acuario Shedd también están desarrollando nuevos dispositivos para criar larvas de coral a mayor escala al aire libre; lo ideal sería en un muelle protegido o similar. Ahora mismo están en fase de prueba; ¡esperamos que en unos meses sepamos lo útiles que son! ¿Hay futuro para los arrecifes de coral? Una pregunta de lo más inquietante para buceadores, amantes de los arrecifes de coral y ecologistas. "Algunos corales sobrevivirán sin duda", dice Alasdair, "pero si los arrecifes de coral como ecosistema productivo sobrevivirán al próximo siglo es una cuestión discutible. A fin de cuentas, la única forma de garantizar la supervivencia de los productivos y bellos arrecifes de coral que conocemos y amamos es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y resolver el problema del calentamiento global. También es esencial que mejoremos la gestión de los factores de estrés a escala local, como la sobrepesca y el desarrollo costero. Si no, los arrecifes de coral estarán entre los primeros grandes ecosistemas en desaparecer, con consecuencias devastadoras para los cientos de millones de seres humanos que dependen de ellos." Así pues, puede haber dos razones por las que la restauración desempeñe un papel importante a la hora de ayudar a preservar los arrecifes de coral para el futuro: ayudando a conservar algunas bolsas -refugios- de arrecifes de coral sanos y manteniendo mientras tanto las funciones ecológicas en la medida de lo posible. "Habrá lugares donde sobrevivan mucho mejor", continúa Alasdair. "Cuanto más tiempo puedas mantener algunas comunidades coralinas sanas, más posibilidades habrá de que la gente resuelva los problemas clave. Se necesitan bolsas de arrecifes de coral sanos, de lo contrario no hay nada desde lo que propagarse. Creo que todos los esfuerzos de restauración de los arrecifes merecen claramente la pena y es muy poco probable que todo sea totalmente en vano." No podría haber mejor comentario final: ¡seguir esforzándonos y no perder la esperanza! Salvar los arrecifes de coral.