Las 6 criaturas más venenosas del mar

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El océano alberga vida marina de todos los tamaños, colores y formas, que son realmente únicos con respecto a cualquier cosa que podamos ver en tierra.

No es probable que la mayoría de estas criaturas te hagan daño alguno, y la mayoría de las personas que entran en el agua nunca entrarán en contacto con nada dañino. Sin embargo, hay algunas criaturas que deberías conocer, por si alguna vez tienes la mala suerte de encontrarte cara a cara con ellas.

Puede que su aspecto sea interesante, pero los siguientes animales marinos son algunas de las criaturas más venenosas del mar... ¡y deben evitarse a toda costa!

1.Caja medusa

Considerada la criatura más mortífera del mar, la medusa caja puede ser hermosa a la vista, pero tiene veneno suficiente para matar a un ser humano en cuestión de minutos.

Originaria de Australia y presente en aguas del Indopacífico, la medusa caja tiene unos 15 tentáculos que pueden alcanzar una longitud de hasta tres metros. Tocar estos tentáculos cubiertos de cnidocitos puede liberar un veneno mortal.

Este veneno ataca el sistema nervioso, la sangre y el corazón de la víctima, y en pocos minutos es probable que experimente dolor intenso, parálisis, problemas respiratorios, paro cardíaco e incluso la muerte.

En muchas zonas de Australia se recomienda llevar trajes antipicaduras para proteger tu piel de las mortales picaduras de medusa.

2. Serpiente de mar

Se conocen 52 especies de serpientes marinas y todas son venenosas. Sin embargo, algunas son más venenosas que otras y sólo unas pocas pueden causar la muerte.

Las serpientes de mar presentan diversos colores y dibujos, pero a menudo son rayadas o manchadas. Las serpientes de mar, que se encuentran sobre todo en las aguas cálidas del Pacífico occidental o del océano Índico, no suelen ser agresivas bajo el agua, pero es probable que muerdan si se las saca del agua. Si te mantienes a distancia de ellas mientras buceas, es poco probable que intenten morderte.

La serpiente marina más venenosa es la serpiente marina de Dubois, que puede encontrarse en Australia, Papúa Nueva Guinea y Nueva Caledonia. Se pueden encontrar en aguas muy poco profundas y, aunque sólo tienen colmillos muy pequeños, pueden dar una mordedura potencialmente mortal.

3. Pez piedra

Considerado el pez más venenoso del mundo, el pez piedra tiene 13 afiladas espinas a lo largo del lomo que liberan un veneno mortal para el ser humano.

Hay cinco especies de pez piedra que se encuentran sobre todo en el Mar Rojo, pero también en Japón yAustralia. Haciendo honor a su nombre, el pez piedra es un maestro del disfraz y a menudo se encuentra camuflado en rocas y corales.

El pez piedra no es agresivo y no se desviará de su camino para dañar a un ser humano. Sin embargo, debido a su camuflaje, es fácil entrar accidentalmente en contacto con uno golpeándolo con la mano o pisándolo en el fondo del océano. Si un humano entra en contacto con un pez piedra, es probable que experimente un dolor insoportable que puede durar días, e incluso puede sufrir parálisis muscular, insuficiencia cardiaca y la muerte.

Para evitar entrar en contacto con los peces piedra, lleva calzado de mar con suela gruesa y evita tocar las rocas o el fondo marino mientras buceas o practicas snorkel.

4. Pulpo de anillos azules

Con sólo cinco centímetros de largo, el pulpo de anillos azules puede ser adorablemente diminuto, pero es el pulpo más peligroso del mundo. Con una picadura tóxica de tetrodotoxina, estas diminutas criaturas pueden matar a un ser humano en cuestión de minutos, o dejarlo paralizado hasta 24 horas.

Hay cuatro especies de este pulpo que se encuentran en arrecifes de coral y pozas mareales de los océanos Pacífico e Índico. A pesar de su mordedura mortal, el pulpo de anillos azules sólo ataca si se le provoca, y sólo se han registrado tres muertes humanas por su causa.

Como puedes adivinar por su nombre, el pulpo tiene anillos azules y negros en el cuerpo y son muy bonitos de ver... ¡desde lejos!

5. Pez león

Los peces león son bastante hermosos a la vista, con un cuerpo blanco y un dibujo a rayas rojas o negras/marrones, y espinas parecidas a plumas que extienden y muestran cuando se sienten amenazados. Estas espinas contienen un veneno que, aunque es improbable que mate a un ser humano, puede causar un dolor intenso si se perfora la piel.

Aunque es originario del Indopacífico, el pez león se introdujo en los sistemas de arrecifes de la costa oriental, el golfo de México y el mar Caribe en el siglo XXI. Se sospecha que la gente los tenía como mascotas y los liberó en el mar. Como se reproducen rápidamente y no hay depredadores naturales del pez león en estas zonas, el pez león se ha convertido en una especie invasora. En muchas zonas del Caribe se anima a los buceadores a pescarlos con arpón para reducir su número... ¡y son deliciosos!

6. Caracol cono

Hay más de 600 especies de caracoles cono, y todas segregan toxinas que son extremadamente venenosas. El caracol cono, un molusco gasterópodo, se encuentra en océanos cálidos y tropicales de todo el mundo.

El caracol cono libera el veneno a través de un largo tubo que sale de su boca cuando detecta una presa cerca. La potencia del veneno varía según la especie; algunos pueden ser tan leves como una picadura de abeja, mientras que otros pueden causar parálisis, visión borrosa o incluso la muerte.

Los caracoles cono son bastante atractivos a la vista, con intrincados dibujos y colores. Algunos sienten la tentación de cogerlos del océano para añadirlos a su colección de conchas, sin darse cuenta de que en su interior vive un animal mortal. Debe evitarse a toda costa el contacto con ellos, ya que incluso con el uso de guantes de buceo pueden picar.

Al bucear es muy importante evitar tocar cualquier cosa. Nuestro tacto no sólo puede perjudicar la salud de algunas formas de vida marina, sino que puede provocar a criaturas venenosas, lo que te expone a un grave riesgo de intenso dolor, ¡o incluso algo peor! Si quieres saber más sobre la vida marina, ¿por qué no te apuntas al programa de especialización en Ecología Marina de SSI? Aprenderás todo sobre los organismos oceánicos y cómo interactuar con ellos de forma segura.

La flotabilidad es una habilidad importante en el buceo autónomo, porque te ayuda a controlar tu posición en el agua. Un mal control de la flotabilidad puede llevarte a tocar el fondo del océano, golpearte las manos con rocas o criaturas marinas venenosas, o dañar los hábitats.

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